Según Jigoro Kano, el objetivo final del judo es el jiko no kansai; buscar la perfección del carácter propio. Esto se centra en el desarrollo de la humildad y la aceptación realista de uno mismo. Sobre la base de esta fortaleza interior, se construye la confianza entre un sensei y sus alumnos, que es la esencia del liderazgo en el judo y en todos los aspectos de la vida.
Las 7 cualidades de liderazgo que se encuentran en el judo
1. Integridad: En mis años de servicio a la USJA, ha habido más de unos pocos que no estaban de acuerdo con mis puntos de vista o políticas. Sin embargo, rara vez se ha cuestionado mi creencia y dedicación a la USJA. Esto es ser fiel a la causa, que es un pilar del liderazgo.
2. Perseverancia: La capacidad de tener autodisciplina y mantener el rumbo frente a la adversidad es otra clave de liderazgo. La madre de mi amigo, cuando yo estaba creciendo, llamaba a esto perseverancia, de la que a menudo decía que tenía abundancia. No fue hasta más tarde en la vida que me di cuenta de que me estaba haciendo un verdadero cumplido.
3. Valor para arriesgarse: Ir a por un gran lanzamiento como uchimata o seionage en un torneo requiere que uno haga un taisabki (pivote) de 180 grados. La gente de BJJ dice que esta es una debilidad del judoca, ya que le da la espalda a sus oponentes. Sin embargo, esas mismas personas de BJJ son las primeras en asombrarse ante un impresionante lanzamiento de judo. Me pregunto si se dan cuenta de que estas técnicas requieren una gran cantidad de riesgo calculado para lograr el objetivo de marcar un ippon.
4. Búsqueda de conocimientos: Los japoneses lo llamaron kaizen o proceso de mejora continua. Por eso Kano incorporó los rangos en el judo. Quería recordar a todos que el judo, al igual que la vida, es un proceso continuo. Alcanzar un nuevo nivel de cinturón es una renovación, ya que marca tanto un principio como un final.
5. Habilidades de autodefensa: Asumir la responsabilidad personal de las propias acciones es importante. Una persona de judo sabe que llamar al 911 no es siempre la respuesta en un apuro. Por lo tanto, al igual que un Boy Scout uno tiene que estar preparado teniendo las habilidades básicas y la capacidad de manejar una situación en el caso de que la caballería esté ocupada luchando una batalla en otro lugar.
6. Pensamiento divergente: se trata de mantener la mente abierta o de pensar fuera de la caja. Un líder rodeado de un grupo de hombres que dicen sí a todo puede estar dando un largo paseo por un muelle corto. Peor aún es cuando las tropas de apoyo lo saben, pero han sido condicionadas a no hablar por miedo a las represalias. Los líderes exitosos admiten fácilmente sus errores en lugar de seguir por el camino equivocado.
7. Devolver a la sociedad: Los buenos líderes miran por la sociedad, no sólo por su propia empresa. Se preocupan por los derechos humanos, el medio ambiente y no sólo por sus propios resultados. Kano dijo que en la raíz del judo hay dos principios: seiryoku zenyo (hacer el mejor uso de tu poder) y jita kyoei (avanzar junto a tu oponente).
A mediados de los años 70, cuando estudiaba en la Universidad de Pittsburgh, un profesor mío nos entregó la siguiente lista de reglas en nuestra primera clase junto con su programa de estudios. Años más tarde, recuerdo haber releído la lista y haberme dado cuenta de su sabiduría. Comparto con ustedes esta lista al pie de la letra y ahora puedo decir con certeza que incluye muchas de las virtudes de liderazgo que se encuentran en el judo y que aplican para todos los que lo practican.
Las 7 reglas para el estudiante del profesor Jack Daniels
1. Nunca te dejes intimidar por la autoridad. En ningún momento, ni por ningún motivo, nadie puede permitir con provecho o seguridad que su facultad de pensar se tome un año sabático, y menos cuando la mente está expuesta a los pensamientos de otras personas.
2. Estar abierto a la convicción, pero negarse a ser convencido hasta que la convicción se convierta en una necesidad.
3. Lee poco, piensa mucho y profundamente. Evita adquirir la mente del saltamontes. Los libros son altamente sugestivos, por lo tanto, elige tus autores con cuidado, tómate el tiempo para pensar en todas las implicaciones y connotaciones de lo que has leído, y comprueba su validez desde todos los ángulos que puedas. Un hombre hambriento debe masticar, tragar y digerir la comida antes de que ésta le nutra. Tragarla entera sólo conduce a la indigestión. Evita la indigestión mental a toda costa.
4. Busca la VERDAD y persíguela, hasta el punto de rehacer tu propia mente cueste lo que cueste, si es necesario. Las “verdades” de hoy serán las “supersticiones” de mañana. No les permitas una “residencia permanente” en tu mente. No busques el mero “conocimiento”, sino la COMPRENSIÓN; tal vez la SABIDURÍA venga después.
5. Nunca te mientas a ti mismo, o serás un tonto perdido.
6. Aprende a pensar más allá de los pensamientos de los hombres que se apoyan en las cosas que ven; recordando siempre: EN LAS COSAS EXTERNAS NO ENCONTRAREMOS LA VERDAD.
7. Haz que tu regla de oro sea no consultar nunca a un autor sobre ningún tema hasta que hayas reflexionado profundamente sobre él y hayas llegado a algunas conclusiones, por muy provisionales que sean.
El legendario entrenador de judo británico, Neil Adams. M.B.E., durante su seminario, al que acabo de asistir, dijo a una sala de 40 cinturones negros, que eran en su mayoría competidores, que debían ser adaptables. Dijo que, ante las constantes modificaciones de las reglas de la FIJ, los mejores jugadores deben ser capaces de aceptar el cambio para salir victoriosos o, simplemente, para sobrevivir. Estoy de acuerdo con Neil en que ser adaptable es un elemento esencial del liderazgo, tanto en el judo como en la vida.
Escrito por Senséi Gary Goltz (8vo Dan).
